martes, 29 de diciembre de 2020

FELIZ AÑO NUEVO

 


AMIGOS COMETARIOS, LES DESEAMOS UN HERMOSO FIN DE AÑO Y QUE EL 2021 SEA UN AÑO EN QUE PODAMOS RECUPERAR LA LIBERTAD Y TENER ESTUPENDOS COMETAS EN EL CIELO.

FELICIDADES!!!

EDGAR ALLAN POE Y LOS COMETAS (PARTE 6)

 


Finalmente, el genio nos pone de frente al fin de nuestro planeta contado desde el más allá (pues no hubo sobrevivientes): desprovista de nitrógeno, la atmósfera de oxígeno puro no solamente es tóxica, sino que prepara la gigantesca conflagración:

“¿Necesito pintarte, Charmion, el desencadenado frenesí de la humanidad? Aquella tenuidad del cometa que nos había inspirado previamente una esperanza era ahora la fuente de la más amarga desesperación. En su impalpable, gaseosa naturaleza percibíamos claramente la consumación del Destino. Y entretanto pasó otro día, llevándose con él la última sombra de la Esperanza. Jadeábamos en aquel aire rápidamente modificado. La sangre arterial batía tumultuosamente en sus estrechos canales. Un delirio furioso se había posesionado de todos los hombres y, con los brazos rígidamente tendidos hacia los cielos amenazantes, temblaban y clamaban. Pero el núcleo del destructor llegaba ya a nosotros; aun aquí, en el Aidenn, me estremezco al hablar. Déjame ser breve... breve como la destrucción que nos asoló. Durante un momento vimos una terrible, cárdena luz que penetraba en todas las cosas. Entonces... ¡inclinémonos Charmion, ante la sublime majestad de Dios el grande!, entonces se alzó un clamoroso y penetrante sonido, tal como si brotara de Su boca, y toda la masa de éter, dentro de la cual existíamos, reventó instantáneamente en algo como una intensa llama roja, cuya insuperable brillantez y abrasante calor no tienen nombre, ni siquiera entre los ángeles del alto cielo del conocimiento puro. Así acabó todo”.

La traducción es la de Julio Cortazar y el cuento entero se puede leer aquí:

http://cometasentrerios.blogspot.com/2014/02/el-fin-del-mundo-por-un-cometa.html


lunes, 28 de diciembre de 2020

EDGAR ALLAN POE Y LOS COMETAS (PARTE 5)

 


Se acerca el fin, la gente empieza a respirar la atmósfera enrarecida por el contacto con la coma del cometa. Los efectos son inquietantes: aunque la coma del cometa era tan tenue que “todos los cuerpos celestes se percibían a través de él”, el aporte del oxígeno cometario rompe el balance entre el nitrógeno y el oxígeno de nuestra atmósfera y la consecuencia inicial es “una insólita agilidad corporal y mental” y “un follaje lujurioso, desconocido hasta entonces”. Pero al día siguiente: “Un espantoso cambio se había operado en los hombres, y la primera sensación de dolor fue la terrible señal para las lamentaciones y el espanto. Aquella primera sensación de dolor consistía en una rigurosa constricción del pecho y los pulmones, y una insoportable sequedad de la piel”. Y luego, un “estremecimiento eléctrico de terror en el corazón universal del hombre… Una combustión irresistible, devoradora, todopoderosa, inmediata: el cumplimiento total, en sus minuciosos y terribles detalles, de las llameantes y aterradoras anunciaciones de las profecías del Santo Libro” cuando el núcleo de Leviatán impacte en la Tierra.

“Pasó otro día, y los hombres respiraron con mayor libertad. No cabía duda de que nos hallábamos bajo la influencia del cometa, y sin embargo vivíamos. Hasta sentimos una insólita agilidad corporal y mental. La extraordinaria tenuidad del objeto de nuestro terror era ya aparente, pues todos los cuerpos celestes se percibían a través de él. Entretanto nuestra vegetación se había alterado sensiblemente y, como ello nos había sido pronosticado, cobramos aún más fe en la previsión de los sabios. Un follaje lujurioso, completamente desconocido hasta entonces, se desató en todos los vegetales.

Pasó otro día más... y la calamidad no nos había dominado todavía. Era evidente que el núcleo del cometa chocaría con la tierra. Un espantoso cambio se había operado en los hombres, y la primera sensación de dolor fue la terrible señal para las lamentaciones y el espanto. Aquella primera sensación de dolor consistía en una rigurosa constricción del pecho y los pulmones, y una insoportable sequedad de la piel. Imposible negar que nuestra atmósfera estaba radicalmente afectada; su composición y las posibles modificaciones a que podía verse sujeta constituían ahora el tema de discusión. El resultado del examen produjo un estremecimiento eléctrico de terror en el corazón universal del hombre.

Se sabía desde hacía mucho que el aire que nos circundaba era un compuesto de oxígeno y nitrógeno, en proporción respectiva de veintiuno y setenta y nueve por ciento. El oxígeno, principio de la combustión y vehículo del calor, era absolutamente necesario para la vida animal, y constituía el agente más poderoso y enérgico en la naturaleza. El nitrógeno, por el contrario, era incapaz de mantener la vida animal y la combustión. Un exceso anómalo de oxígeno produciría, según estaba probado, una exaltación de los espíritus animales, tal como la habíamos sentido en esos días. Lo que provocaba el espanto era la extensión de esta idea hasta su límite. ¿Cuál sería el resultado de una extracción total del nitrógeno? Una combustión irresistible, devoradora, todopoderosa, inmediata: el cumplimiento total, en sus minuciosos y terribles detalles, de las llameantes y aterradoras anunciaciones de las profecías del Santo Libro”.

La traducción es la de Julio Cortazar y el cuento entero se puede leer aquí:

http://cometasentrerios.blogspot.com/2014/02/el-fin-del-mundo-por-un-cometa.html

miércoles, 23 de diciembre de 2020

EL COMETA VENUS

 


Uno de los últimos coletazos históricos del miedo a los cometas como productores de cometas tuvo la forma de un libro publicado en 1950 y que, increíblemente, fue un enorme éxito editorial y generó un intenso debate científico: “Words in collision” (“Mundos en colisión”)  del ruso Emmanuel Velikovsky. El autor recurre a un procedimiento que seguramente tiene antecedentes y que tuvo herederos en gente como el ufólogo Erich Von Däniken: cree a pies juntillas en el relato bíblico del Viejo Testamento y después trata de confirmar todos sus eventos milagrosos con explicaciones extrañas que involucran hipótesis claramente no probadas, ni siquiera verosímiles (extraterrestres en el caso de von Däniken, el cometa Venus en el caso de Velikovsky). Sí, leyeron bien, el cometa Venus. En “El cerebro de Brocca”, colección de ensayos de Carls Sagan leemos la singular hipótesis de cómo el planeta Venus, según Velikovsky, fue en sus orígenes un cometa que surgió de Júpiter, pasó por las cercanías de la Tierra y Marte en varias ocasiones (¡Y en tiempos históricos incluso!) para luego, hace algunos milenios, estabilizarse en órbita solar y transformarse en el planeta Venus:

“El planeta Júpiter expulsó de su seno un cometa de grandes dimensiones que hacia el 1500 antes de nuestra era colisionaría levemente con nuestro planeta. Y de tal colisión derivan, directa o indirectamente, todas las plagas y tribulaciones faraónicas descritas en el Éxodo bíblico. La materia responsable de que las aguas del Nilo se convirtieran en sangre procedía del cometa. Las alimañas descritas en el Éxodo provienen del cometa, las moscas y quizá los escarabajos se han visto empujados a la fecundación y a multiplicarse gracias al calor por éste desprendido, como sucediera en el caso de las ranas, originariamente terrestres. Los terremotos provocados por el cometa arrasaron las edificaciones egipcias sin dañar en absoluto las de los hebreos. (A decir verdad, lo único que parece no tener su origen en el cometa es el colesterol responsable del endurecimiento del corazón del faraón egipcio) Cómo no, todo lo indicado y más se desprendió de la cola del cometa, responsable también de que las aguas del Mar Rojo se abrieran en dos cuando Moisés alzó su vara ante ellas, tal vez a causa de la marea creada por el campo gravitatorio del cometa o a causa de alguna imprecisa interacción eléctrica o magnética desencadenada entre éste y el Mar Rojo. Luego, una vez cruzaron sin el menor percance los hebreos, evidentemente el cometa se alejó lo suficiente como para que las aguas partidas en dos volvieran a su viejo cauce y ahogaran a las huestes del faraón. Durante los cuarenta años subsiguientes, mientras vagaban errantes por el desierto del pecado, los hijos de Israel se alimentaron del maná que les caía de los cielos, que resultó ser un compuesto de hidrocarbonos (o carbohidratos) originados en la cola del cometa.

Otra posible lectura de Worlds in Collision parece dar a entender que entre el desencadenamiento de las plagas y los sucesos del Mar Rojo debió transcurrir un mes o dos y que tuvieron sus orígenes en sendos pasos del cometa por nuestra atmósfera. Tras la muerte de Moisés, una vez el manto del liderazgo ha pasado a hombros de Josué, este mismo cometa volverá a rozar nuestro planeta con chirriante estruendo. Cuando Josué

clama «Sol, párate sobre Gibeón; y tú, Luna, sobre el valle de Ajalón», la Tierra -quizás a causa una vez más de interacción gravitatoria, o tal vez en razón de cierta inducción magnética inespecífica generada sobre la corteza terrestre - cesa inmediatamente de girar y le permite a Josué alcanzar la victoria en la batalla. Acto seguido el cometa está a punto de colisionar con Marte, interaccionando con él con tal fuerza que le arranca de su órbita y le pone en peligro por dos veces de chocar con nuestro planeta, cuasi-colisiones que provocan la destrucción de los ejércitos del rey asirio Sanaquerib, responsable de la miserable existencia que venían soportando las últimas generaciones de israelitas. En la fase siguiente Marte se incorpora a su órbita actual y el cometa entra en órbita circular alrededor del sol para convertirse en el planeta Venus, que en opinión de Velikovsky no había existido hasta este preciso instante. Mientras tanto, la Tierra se ponía de nuevo en movimiento, y éste mantenía unas características muy similares a las que tuviera antes de todos estos encuentros celestes.

Hasta alrededor del siglo VII a.C. no debió producirse ningún comportamiento planetario aberrante, y ello a pesar de la abundancia con que parecen haberse producido durante el segundo milenio. Nadie, ni defensores ni detractores, podrá dejar de admitir que se trata de un relato notable y sorprendente. Pero además, y por fortuna, se trata de un relato susceptible de verse sometido a contrastación científica. Las hipótesis de Velikovsky le llevan a efectuar ciertas predicciones y deducciones. Por ejemplo, que los cometas son grandes masas de materia expulsadas del seno de los planetas; que los cometas son capaces de pasar muy cerca de los planetas, incluso rozarlos, creando perturbaciones; que en los cometas, así como en las atmósferas de Júpiter y Venus, viven alimañas; que en todos estos lugares que acabamos de citar también podemos encontrar carbohidratos; que en la península de Sinaí cayeron de los cielos suficientes carbohidratos como para alimentar durante cuarenta años a las errabundas masas israelitas que cruzaban el desierto; que órbitas excéntricas de planetas y cometas pueden tornarse perfectamente circulares tras el paso de unos cientos de años; que se producían fenómenos volcánicos y tectónicos en nuestro planeta e impactos de diferentes cuerpos celestes sobre la superficie lunar simultáneamente a tales catástrofes; y así sucesivamente. Deseo discutir cada uno de tales puntos así como algunos otros no mencionados hasta aquí, como por ejemplo el supuesto de que la superficie de Venus se halla a elevada temperatura, que aunque sea un aspecto secundario con respecto a la sustentación de sus hipótesis no por ello ha dejado de jugar un papel primordial como prueba a favor post hoc. También deseo someter a examen una «predicción» adicional y fortuita de Velikovsky, a saber, que los casquetes polares de Marte están compuestos por carbono o carbohidratos. La conclusión de mi análisis crítico es que cuando Velikovsky se muestra original en sus planteamientos es más que probable que esté equivocado, mientras que en aquellos puntos en que acierta se sustenta en ideas ya previamente empleadas por otros. No son pocas las veces en las que además de sustentar errores no presenta la menor originalidad, aspecto este último de notable importancia pues se ha mantenido que ciertas circunstancias (por ejemplo, la elevada temperatura de la superficie de Venus) fueron predichas por Velikovsky en momentos en que todo el mundo las imaginaba muy distintas.Pero como tendremos oportunidad de ver, en realidad no ha sido así”

El relato de Velikovsky no tiene ningún sentido histórico, por lo que intentar probar que los acontecimientos no solamente improbables astronómicamente, sino más bien imposibles, es una empresa sin sentido. Sin embargo, es lo que hace Carl Sagan, con su prosa tan atractiva. Disecciona una por una las falacias astronómicas del relato de manera innecesaria, cualquiera con cierto conocimiento histórico y que sepa de astronomía planetaria lo que dice la entrada en un diccionario se da cuenta de que no es siquiera probable. Pero el bueno de Sagan elige un contrincante como si fuera un boxeador que elige pelear con un niño de seis años para mostrarnos lo que es la técnica boxística. Otros ensayos de la misma sección “Fabricantes de paradojas” siguen el mismo derrotero, incluso se nos dice cuáles son los libros de ciencia ficción que podemos leer si respetamos la ciencia y cuáles no (la literatura parece estar ausente del debate).

Siempre me resultó un poco irritante la distinción que hace Sagan, que por otro lado es un escritor genial, entre los científicos (y los que admiran a los científicos, porque es pícaro y siempre incluye a quienes se siente amantes de la ciencia por leer divulgación) y el resto de la humanidad, que carecería de la racionalidad de los primeros. ¿Acaso no hay racionalidad fuera de la ciencia? ¿Acaso la ciencia es siempre racional? No, no lo es, no lo ha sido, mayoritariamente, en esta crisis del COVID-19. Y me parece que el análisis meticuloso de la tontería de Velikovsky por parte de Sagan es un alarde de fariseísmo científico, ni más ni menos.


viernes, 18 de diciembre de 2020

LOS COMETAS OBSERVADOS POR LA SONDA SOLAR PARKER

 

Esta sonda solar de la NASA, lanzada en 2018, ha podido observar varios cometas, una especie de “yapa”, como decimos los argentinos de los pequeños regalos que nos daban a los niños los almaceneros cuando comprábamos, por ejemplo, caramelos. Comprábamos 5 y si el almacenero era bueno (cuando era niño todos lo eran) te regalaba uno “de yapa”. Volviendo a la sonda Parker, un verdadero hito en la ciencia de nuestra estrella, ha conseguido varios registros espectaculares, por ejemplo, el gran cometa del año 2020, el NEOWISE (en julio de 2020)



Credits: NASA/Johns Hopkins APL/Naval Research Lab/Parker Solar Probe/Guillermo Stenborg

Pero, al igual que la sonda SOHO, los cometas rasantes al Sol son el objetivo científico colateral más importante de esta sonda solar. Los cometas rasantes tienen, casi todos, el final asegurado: ser destruidos por el calor descomunal del Sol. En el caso del GIF que vemos a continuación, el cometa rasante SOHO-4063, fue el primer cometa rasante observado por Parker (aunque fue descubierto por SOHO, como su nombre indica).



Credits: NASA/Johns Hopkins APL/Naval Research Lab/Parker Solar Probe/Guillermo Stenborg

El estudio de estos cometas rasantes (que solamente pueden ser captados por los instrumentos de este tipo de sonda)se verá favorecido sustancialmente, por cuanto en las imágenes se puede ver que el Soho aparece más brillante que en las típicas imágenes de rasantes obtenidas por la sonda que lo descubríó, por lo que se multiplicarán aun más los cometas rasantes descubiertos.

 This series of images from the WISPR instrument on board Parker Solar Probe shows a small sungrazing comet, SOHO-4063, as it approached the Sun on Sept. 13-14, 2020. This is the first observation of a sungrazing comet by Parker Solar Probe’s instruments.

Credits: NASA/Johns Hopkins APL/Naval Research Lab/Parker Solar Probe/Guillermo Stenborg

jueves, 17 de diciembre de 2020

EDGAR ALLAN POE Y LOS COMETAS (PARTE 4)

 


EDGAR ALLAN POE Y LOS COMETAS (PARTE 4)

Seguimos con este hermoso relato cometario. Justo cuando la gente había sido convencida por los científicos de que no había nada que temer, el cometa se transforma en una presencia ominosa en el cielo:

“Los daños menores que pudieran resultar del contacto con el cometa eran tema de minuciosas discusiones. Los entendidos hablaban de ligeras perturbaciones geológicas, de probables alteraciones del clima y, por consiguiente, de la vegetación, aludiendo también a posibles influencias magnéticas y eléctricas. Muchos sostenían que los efectos no serían visibles ni apreciables. Y mientras las discusiones proseguían, su objeto se aproximaba gradualmente, aumentaba su diámetro y más brillante se volvía su color. La humanidad palidecía al verlo acercarse. Todas las actividades humanas estaban suspendidas.

La evolución de los sentimientos generales llegó a su culminación cuando el cometa hubo alcanzado por fin un tamaño que sobrepasaba toda aparición anterior. Desechando las últimas esperanzas de que los astrónomos se hubieran equivocado, los hombres sintieron la certidumbre del mal. Todo lo quimérico de sus terrores había desaparecido. El corazón de los más valientes de nuestra raza latía precipitadamente en su pecho. Y sin embargo bastaron pocos días para que aun esos sentimientos se fundieran en otros todavía más insoportables. Ya no podíamos aplicar a aquel extraño astro ninguna idea ordinaria. Sus atributos históricos  habían desaparecido. Nos oprimía con una emoción espantosamente nueva. No lo veíamos como un fenómeno astronómico de los cielos, sino como un íncubo sobre nuestros corazones y una sombra sobre nuestros cerebros. Con inconcebible rapidez había tomado la apariencia de un gigantesco manto de llamas muy tenues extendido de un horizonte al otro”

La traducción es la de Julio Cortazar y el cuento entero se puede leer aquí:

http://cometasentrerios.blogspot.com/2014/02/el-fin-del-mundo-por-un-cometa.html


lunes, 14 de diciembre de 2020

EL ENCUENTRO DE LA SONDA SOLAR ORBITER CON LOS RESTOS DEL COMETA ATLAS

 


La sonda Solar Orbiter de la Agencia Espacial Europea es el laboratorio solar más complejo lanzado hacia nuestra estrella. El lanzamiento se produjo el 10 de febrero de 2020. Será la primera vez que se estudie la conexión entre los eventos en la superficie solar y los que se producen en el espacio interplanetario alrededor de la nave. Los estudios se realizarán desde distintas órbitas y según Wikipedia tienen como objetivo contestar a las siguientes preguntas:

¿Cómo y en qué lugar de la corona solar se originan el viento solar, el plasma y el campo magnético?

¿Cómo las fases transitorias solares conducen la variabilidad heliosférica?

¿Cómo las erupciones solares producen radiación de partículas energéticas que llenan la heliósfera?

¿Cómo funciona la dínamo solar y cómo conducen las conexiones entre el Sol y la heliosfera?

Apenas iniciado su viaje, apareció en C/2019 Y4 ATLAS y los investigadores se percataron de que la Solar Orbiter podría realizar un trabajo extra, ya que pasaría por las dos colas del cometa. Por supuesto, sus instrumentos no estaban diseñados para la ciencia cometaria, pero no se podía desaprovechar la oportunidad. Pero el ATLAS no llegó a la cita, se desintegró cuando la Solar Orbiter todavía estaba lejos.  Pero la misión cometaria de la Solar Orbiter se concretó, aunque de otra manera: fue la primera sonda en encontrarse con los restos de un cometa desintegrado. Sus instrumentos pudieron detectar poderosas ondas provenientes del campo magnético extinto y también numerosas ondas de nubes de polvo, una tras otra, provenientes del interior del núcleo extinto.


¿SON PELIGROSOS LOS COMETAS?

 

“Cuando consideramos el movimiento de los cometas- y reflexionamos sobre las leyes gravitatorias, nos percatamos de inmediato de que su aproximación a la Tierra puede desencadenar acontecimientos calamitosos equiparables al diluvio universal, sepultar nuestro planeta en una lluvia de fuego, romperlo en mil pedazos o, como mínimo, alejarlo de su órbita, de su Luna, o, todavía peor, convertirlo en un satélite de Saturno, con ¡o que se cerniría sobre nosotros un invierno de siglos que haría imposible la vida a hombres y animales. Y tampoco debe pasarse por alto la importancia de las colas de los cometas si en su trayectoria las dejan total o parcialmente en el seno de nuestra atmósfera”

J. H. LAMBERT

Cosmologische Briefe über die Einríchtung des Weltbaues (1761)

“Por peligroso que pueda ser el impacto de un cometa, sería tan ligero e insignificante que sólo provocaría daños en la parte de nuestro planeta en la que cayera. Incluso podría quedar en paz nuestra conciencia si a cambio de la devastación de un reino el resto de la Tierra pudiera disfrutar de las curiosidades que albergase en su seno un cuerpo celeste llegado desde tan lejos. Quizá nos llevásemos la enorme sorpresa de constatar que los restos de estas masas hasta ahora menospreciadas estaban constituidos por oro y diamantes. Aunque, ¿quién quedaría más asombrado, nosotros o los habitantes de los cometas arrojados sobre nuestro planeta? ¡Cuán extraños nos encontraríamos unos a otros!”

MAUPERTUIS,

Lettre sur la comete (1752)


jueves, 10 de diciembre de 2020

RASGOS DISTINTIVOS DEL COMETA NEOWISE

 

En la conferencia anual de la Association of Lunar and Planetary Observers, que se celebró por primera vez online el 2 y 3 de octubre, pudimos disfrutar la conferencia de Carl Hegenrother, Coordinador de la Sección Cometas sobre la campaña de observación del cometa Neowise en este maldito 2020. Nos gustaría destacar una serie de rasgos distintivos de la coma, propios de cometas muy brillantes. Por empezar, el color amarillo (tan relacionado en la historia con el presunto carácter ígneo de los cometas) por las emisiones en la línea del sodio, como vemos en esta imagen de Chris Schur:


Además podemos observar lo que se conoce, incorrectamente claro, como “la sombra del núcleo”, que es una bifurcación de la coma que vemos en el siguiente sketch de Christian Harder (Luis Mansilla en la última conferencia de su serie cometaria para “Astronomía en cuarentena” de la Sociedad Lunar Argentina la llama “sombra de condensación central”):


Lo mas espectacular son los jets en rotación y las expansiones de las capas externas de la coma, como vemos en este gif:



jueves, 3 de diciembre de 2020

SEGURO CONTRA COMETAS

 


No tenga temor a los fuegos del cometa Halley. El Profesor Wilson de Harvard dice: “Puede haber una lluvia de particular cargadas mientras la Tierra pase por la cola del cometa mañana a las 11 PM pero no hay motivos para alarmarse o temer” , especialmente si su propiedad está protegida por una Póliza de Pronto Pago de Seguro contra incendios Dillenback, una póliza con precios convenientes, aceptaba por todos los bancos y compañías fiduciarias y garantizada para ser:

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martes, 1 de diciembre de 2020

EDGAR ALLAN POE Y LOS COMETAS (PARTE 3)

 

Retomamos el relato, que dejamos hace ya quince días (ahora me percato de lo atareado que han sido, que me forzaron a dejar este relato en suspenso).

Se descubre que el cometa tiene rumbo de colisión, pero la orgullosa ciencia positivista de mediados del siglo XIX ya no teme a las colisiones con los cometas tras determinarse que son muy pocos densos y compuestos primordialmente de gas. Como sabemos, los cometas tienen un núcleo sólido para nada despreciable, así que en este caso la ciencia astronómica daba falsas esperanzas. Pero, quedaba la composición de los gases que forman lo que hoy conocemos como coma. Fue el descubrimiento de que el Halley tenía una coma con fuerte presencia de cianógeno (que da el color verde característico de muchos cometas) lo que genero el pánico de 1910, cuando se pensó que respiraríamos cianuro cuando la Tierra atravesara la cola del cometa.

“Los elementos del extraño astro fueron inmediatamente calculados, y todos los observadores coincidieron en que su paso, en el perihelio, lo aproximaría mucho a la tierra. Dos o tres astrónomos de renombre secundario sostuvieron resueltamente que el choque era inevitable. Imposible expresar el efecto de esta noticia en las gentes. Durante unos pocos días no quisieron creer en una afirmación que su inteligencia, tanto tiempo aplicada a consideraciones mundanas, no podía aprehender de ninguna manera. Pero la verdad de un hecho de importancia vital se abre paso en el entendimiento del más estólido. Los hombres comprendieron finalmente que los astrónomos no mentían, y esperaron el cometa. Al principio su acercamiento no parecía muy rápido, y nada de insólito había en su aspecto. Era de un rojo oscuro, con una cola apenas perceptible. Durante siete u ocho días no advertimos ningún aumento en su diámetro aparente, y su color cambió muy poco. Entretanto los negocios ordinarios de la humanidad habían sido suspendidos y todos los intereses se concentraban en las discusiones científicas referentes a la naturaleza del cometa. Aun los más ignorantes forzaban sus indolentes inteligencias para entenderlas. Y los sabios consagraron entonces su intelecto, su alma, no ya a aliviar los temores o a sostener sus amadas teorías, sino a buscar la verdad, a buscarla desesperadamente. Gemían en procura del conocimiento perfecto. La verdad se alzó en toda la pureza de su fuerza y de su excelsa majestad, y los sensatos se inclinaron y adoraron.

La opinión según la cual nuestro globo o sus habitantes sufrirían daños materiales de resultas del temible contacto, perdía diariamente fuerza entre los sabios, y a éstos les era dado ahora gobernar la razón y la fantasía de la multitud. Se demostró que la densidad del núcleo del cometa era mucho menor que la de nuestro gas más raro; el inofensivo pasaje de un visitante similar entre los satélites de Júpiter era argüido como un ejemplo convincente, capaz de calmar los temores. Los teólogos, con un celo inflamado por el miedo, insistían en la profecía bíblica, explicándola al pueblo con una precisión y una simplicidad que jamás se había visto antes. La destrucción final de la tierra se operaría por intervención del fuego; así lo enseñaban con un brío que imponía convicción por doquier; y el que los cometas no fueran de naturaleza ígnea (como todos sabían ahora) constituía una verdad que liberaba en gran medida de las aprensiones sobre la gran calamidad predicha. Es de hacer notar que los prejuicios populares y los errores del vulgo concernientes a las pestes y a las guerras —errores que antes prevalecían a cada aparición de un cometa— eran ahora completamente desconocidos.

Como naciendo de un súbito movimiento convulsivo, la razón había destronado de golpe a la superstición. La más débil de las inteligencias extraía vigor del exceso de interés”

La traducción es la de Julio Cortazar y el cuento entero se puede leer aquí:

http://cometasentrerios.blogspot.com/2014/02/el-fin-del-mundo-por-un-cometa.html