viernes, 30 de noviembre de 2018

UN ACERCAMIENTO ESPECTACULAR DEL COMETA 46P WIRTANEN PARA EL 16 DE DICIEMBRE



Imagen del cometa Wirtanen tomada el pasado 26 de noviembre desde Namibia por Gerald Rhemann. Crédito: Gerald Rhemann.



El 16 de diciembre de 2018 se producirá uno de los hitos de la astronomía cometaria de este siglo: el cometa 46P/Wirtanen (el más brillante del año) tendrá un acercamiento a la Tierra a una distancia de 7 millones de kilómetros, o 30 veces la distancia a la Luna, o 0.7 Unidades Astronómicas. Es uno de los diez acercamientos más próximos de un cometa en los tiempos modernos, pero además hay una serie de circunstancias que lo hacen más espectacular, una verdadera cadena de coincidencias que privilegian el perihelio de 2018:
1.- Es un cometa periódico, y por lo tanto su órbita es conocida con cierta exactitud. El período orbital del 46P es de 5 años y medio.
2.-En el afelio el Wirtanen llega hasta la órbita de Júpiter y las perturbaciones gravitatorias de éste han ido acortando la órbita del cometa, reduciendo el período entre dos perihelios de los casi 7 años de 1912 a los actuales cinco años y medio, y también acercando la distancia al Sol en cada perihelio. Esta disminución de la distancia al Sol hace prever que el núcleo sufra el calentamiento mucho más marcado que en pasos anteriores (no sabemos si antes de su descubrimiento en 1948 en el Observatorio Lick el cometa tuvo un acercamiento tan próximo al Sol como el de este año), lo que generará mucho más actividad en el núcleo y una coma más brillante. 
3.-El acercamiento de 2018 será excelente en cuanto a la geometría observacional, ya que al 16 de diciembre estará en oposición con la Tierra y alto en los cielos de ambos hemisferios, lo que garantiza mucho tiempo de observación por encima de los 20 grados sobre el horizonte. Esas condiciones no se repetirán en el próximo perihelio en 2024.
4.-El máximo acercamiento a la Tierra de 2018 ocurrirá 4 días después del perihelio (12 de diciembre) por lo que el cometa estará en el máximo de su actividad.
5.-Es un cometa hiperactivo con tasas de producción de gas y polvo superiores al promedio. Comparte la categoría de hiperactivo con un ilustre cometa, el 103P/Hartley 2, por lo que el estudio de éste último es muy importante para predecir el del 46P. La producción de agua en el núcleo del 46P es tan alta que indicarían que el 100% de la superficie del núcleo sería activa, lo que es imposible. El mecanismo que explicaría la hiperactividad sería el mismo que la produce en el 103P: el núcleo contendría hielos hipervolátiles por debajo de la superficie que cuando subliman liberan hielo de agua generan una “tormenta de nieve” en las capas más cercanas al núcleo de la coma, lo que lo hace mucho más visible.  




La tormenta de hielo registrada por Deep Impact en el cometa 103P/Hartley 2, cometa muy similar al Wirtanen.

6.-Las observaciones desde 1948 indican que el 46P es un cometa muy estable en su comportamiento, por lo que las predicciones sobre su brillo en diciembre deberían ser muy confiables. Dichas predicciones, a partir de la realizada por el famoso Seiichi Yoshida indican que la magnitud máxima el 16 de diciembre sería 3, lo que en cielos oscuros lo haría visible a simple vista. Por supuesto, como la magnitud de un cometa es la de un brillo distribuido por toda la coma (que ya sabemos que tiene un diámetro muy grande), nuestros ojos observaran un brillo más difuso, por lo que seguramente deberemos recurrir a binoculares, al menos en la ciudad.
Esta serie de condiciones hacen que el acercamiento del 46P Wirtanen sea histórico, ya que las condiciones de observación desde Tierra serían equivalentes a las del sobrevuelo lejano de una sonda, con el beneficio de todos los telescopios e instrumentos que desde Tierra pueden observar y registrar. Las posibilidades de estudio desde la Tierra son numerosas e incluyen el monitoreo de la variabilidad rotacional y de los estallidos, el estudio del núcleo con radar y la posibilidad única de estudiar la zona más interior de la coma. El 46P es casi un gemelo del 103P Hartley 2, como vimos, lo que permitirá contrastar los datos obtenidos por la misión de extensión de la sonda Deep Impact en 2010 con los que se obtengan ahora.
Los resultados de estos estudios, en lo que una parte no menor provendrá de la campaña de observación que realizan numerosos astrónomos amateurs, prometen un futuro conocimiento muy amplio del 46P, que de por sí es un considerado un objetivo ideal para una futura misión espacial. De hecho, pocos días antes del lanzamiento de la misión Rosetta en enero de 2003, una prueba de lanzamiento del cohete Ariane 5 fue un fracaso y la misión se postergó. La Rosetta original iba al Wirtanen, pero el postergamiento hizo necesario un cambio de planes y el objetivo secundario entró en escena, el 67P Churyumov-Gerasimenko. Incluso una misión diseñada para el Programa Discovery de la NASA, la finalista de 2011 Comet Hopper, tenía como destino el 46P. Con los conocimientos que sumaremos de este acercamiento, el Wirtanen tiene destino de objetivo de alguna sonda futura.

lunes, 26 de noviembre de 2018

ACERCAMIENTO DEL COMETA WIRTANEN

En este interesante video de la NASA se muestra la geometría de la órbita del cometa 46P Wirtanen en su próximo acercamiento a la Tierra el mes que viene:


46P WIRTANEN … Y DESPEDIDA DE LA AEA



Sin dudas, el 46P Wirtanen es el cometa del año. Cuando tengamos luna nueva en pocos días, es probable que lo podamos ver en cielos oscuros a simple vista en su máximo acercamiento a la Tierra.
Así se lo podía ver en una única toma de 91 segundos a las 5.24 UT del 18 de noviembre de 2018, imagen tomada por Francisco Alsina Cardinali, Juan Manuel Biagi y Alberto Anunziato.
Disfruté mucho de nuestra última imagen en el Observatorio de Oro Verde de la Asociación Entrerriana de Astronomía porque a título personal será la última que comparta con ustedes. Seguiremos con el blog, claro, pero no habrá más imágenes de la AEA, institución a la que ya no pertenezco.

jueves, 22 de noviembre de 2018

¡EL CAZADOR DE COMETAS DE ARIZONA DON MACHHOLZ LO HIZO DE NUEVO!


Descubrió su cometa nº 12 hace pocos días.



El nuevo cometa de Don Machholz se parece a una bola de pelusa en esta imagen tomada el 9 de noviembre de 2018. Se está moviendo hacia el noreste en el cielo de la mañana en Virgo.
Por Jean-Francois Soulier
Con todas las búsquedas automáticas en busca de cualquier cosa que se arrastra por el cielo, es una maravilla que un aficionado todavía pueda descubrir un cometa. Sin embargo, eso es exactamente lo que sucedió el 7 de noviembre, cuando Don Machholz, el cazador visual de cometas vivo más exitoso, descubrió visualmente un nuevo cometa en Virgo cerca del amanecer desde su hogar en Colfax, California. Dos observadores japoneses, Shigehisa Fujikawa y Masayuki Iwamoto, vieron el objeto de manera independiente casi al mismo tiempo y agregaron sus autógrafos al último nombre oficial del cometa.
Vamos a escuchar al descubridor a través de su cuenta de Twitter:
"746 horas de búsqueda desde mi último descubrimiento visual de cometas en 2010 y el 7 de noviembre a las 7.53 UT descubrí visualmente mi duodécimo cometa y ¡hoy fue confirmado!"
Felicitaciones, Don. ¡Has vencido a los robots!


El nuevo cometa, ahora formalmente llamado C/2018 V1 (Machholz-Fujikawa-Iwamoto) brilla en verde y luce una débil cola apuntando al oeste-noroeste en esta imagen tomada el 11 de noviembre. Crédito: Michael Jäger
Por ahora, el cometa ha recibido las designaciones temporales TCP J12192806-0211143 y DM001. De acuerdo con las primeras observaciones compartidas en la lista de correo de comets-ml, el nuevo objeto es de magnitud 10.2 con un coma de 4 ′ (minuto de arco) moderadamente condensado y una cola corta que se extiende hacia el oeste en el ángulo de posición 264 °. Por suerte para nosotros, el nuevo visitante se encuentra a unos 20 ° de altura justo antes del comienzo del crepúsculo matutino en Virgo, muy cerca de la estrella fácil ubicable a simple vista (¡un sistema doble hermoso!) Gamma (γ) Virginis.
No está claro cuándo será el perihelio; he visto estimaciones desde fines de noviembre hasta mediados de diciembre. Pronto sabremos si se trata de un objeto nuevo o el regreso de un cometa periódico perdido hace mucho tiempo. Probablemente sea lo primero.

El campeón cometario Don Machholz junto a su telescopio reflector de 18". Crédito: AnneLouis Machholz.
Traducción parcial de:

miércoles, 21 de noviembre de 2018

DESINTEGRACIÓN DEL C/2017 S3 PANSTARRS

C/2017 S3 (PANSTARRS) - en rápido proceso de desintegración antes de alcanzar el perihelio
La Curva de luz de las observaciones visuales recibidas durante estos meses ya mostraba un comportamiento errático y muy extraño.
El tramo de las observaciones CCD que nosotros no publicamos en este caso mostraban desde su inicio un comportamiento normal hasta aproximadamente hasta los primeros días del mes de Julio; eso fue a unos 43 días antes de su perihelio.
Posteriormente, sufrió un decaimiento que llegó a un mínimo (-33) y de allí vuelve nuevamente a aumentar su brillo (-28), para finalmente comenzar un proceso final de desfragmentación y en desintegración final.
Hay ahora intentos de observación pero son negativos, luego de las observaciones de Juan José González (España) de registrar y reportarnos el "polvo cometario" liberado por el evento ocurrido que se sostenía entonces en los valores de dicha órbita. Paulatinamente, como es de esperar, las partículas se ira dispersando siguiendo trayectorias diferentes y muy afectadas por el viento solar, en diferentes direcciones, perdiéndose en un volúmen mucho mayor e invisible ya.
Plot de Magnitud observada m1 (Mag) versus días antes del Perihelio (T)
Observaciones visuales:
 https://cometobservationsdatabase.wordpress.com/non-periodic-unnumbered/c-2017-s3-panstarrs/

FUENTE:
https://cometobservationsdatabase.wordpress.com/non-periodic-unnumbered/c-2017-s3-panstarrs/

sábado, 17 de noviembre de 2018

46P WIRTANEN DESDE ORO VERDE



El cometa del año ya puede observarse en nuestros cielos. Así se veía en un apilado de diez tomas de 2 minutos el 4 de noviembre:



Y así en un apilado de 10 tomas de 1 minuto 20 segundos el 10 de noviembre:


Ambas imágenes fueron obtenidas desde nuestro observatorio de Oro Verde con un Celestron CPC 1100 de 11 pulgadas y una cámara Canon Rebel XS por Walter Elias.
Como podrán observar, va aumentando no solamente su brillo sino también el tamaño de la coma y adquirió el característico color verdoso de tantos cometas, debido a la emisión por fluorescencia de los gases que componen la coma al ser alcanzados por la radiación solar ultravioleta, entre ellos el famoso cianógeno, al que tantas calamidades futuras se le atribuyeron.

domingo, 11 de noviembre de 2018

LAS OBSERVACIONES PERDIDAS DE LA SOYUZ 13



Hace poco tiempo posteamos las observaciones del cometa Kohoutek que se hicieron desde la estación espacial norteamericana Skylab. El Kohoutek fue el primer cometa observado desde el espacio por astronautas, precisamente por la tripulación del Skylab el 18 de diciembre de 1973. Ese mismo día fue lanzada la misión espacial soviética Soyuz 13, que volvió a Tierra el 26 de diciembre. Esta fue la primera misión soviética exclusivamente dedicada a la ciencia, la nave había sido modificada especialmente para poder albergar el Laboratorio Espacial Orion 2, utilizado por los dos miembros de la tripulación por el ingeniero de vuelo Valentin Lebedev (el Comandante fue Pyotr Klimuk).
La historia de la Soyuz 13 es interesante, fue la segunda astronave del diseño Soyuz 7K-T, la segunda generación de Soyuz, que sirvieron entre 1973 y 1981. La primera generación de Soyuz tenían espacio para tres cosmonautas, pero… sin trajes espaciales. La muerte de los 3 tripulantes de la Soyuz 11 en la reentrada el 29 de junio de 1971 (los primeros en habitar una estación espacial, la Salyut 1) por asfixia por un escape de oxígeno, obligó a un rediseño que implicó agrandar la nave para permitir dos tripulantes pero con trajes espaciales. Esa ampliación permitió que la Soyuz 13 llevara un laboratorio espacial y se realizaron numerosos estudios astronómicos con un telescopio Cassegrain de 240 mm. de apertura y un espectografo.
Y ahora viene el misterio que no pudimos resolver. La Soyuz 13 observó el cometa Kohoutek e incluso se habría programado su lanzamiento para coincidir con su perihelio (recordemos que las observaciones del Skylab no estaban en el plan original de la misión). Pero las únicas referencias encontrables en la web se refieren a que “adicionalmente” observaron el Kohoutek. ¿Pero qué observaron? ¿Cuáles fueron los resultados?

jueves, 8 de noviembre de 2018

EL COMETA McNAUGHT AYUDA A ENTENDER EL MISTERIO DE LAS COLAS MÚLTIPLES



Nuevas perspectivas sobre las colas de los cometas están soplando en el viento solar

Por Lina Tran (Goddard Space Flight Center-NASA)

Ingenieros y científicos se reunieron alrededor de una pantalla en una sala de operaciones en el Laboratorio de Investigación Naval en Washington, DC, ansiosos por poner sus ojos en los primeros datos de la nave espacial STEREO de la NASA. Era enero de 2007, y los dos satélites STEREO (Solar and Terrestrial Relations Observatory), que se había lanzado unos meses antes, estaban abriendo los ojos de sus instrumentos por primera vez. En primer lugar: STEREO-B. La pantalla parpadeó, pero en lugar del vasto campo de estrellas que esperaban, una mancha de color blanco perla y plumoso, como el ala de un ángel, llenó el marco. Durante unos pocos minutos de pánico, el astrofísico de la NRL Karl Battams temió que algo estuviera mal con el telescopio. Entonces, se dio cuenta de que este objeto brillante no era un defecto, sino una aparición, y estas fueron las primeras imágenes satelitales del cometa McNaught. Más tarde ese día, STEREO-A devolvería observaciones similares.
El cometa C / 2006 P1, también conocido como el cometa McNaught, llamado así por el astrónomo Robert McNaught, quien lo descubrió en agosto de 2006, fue uno de los cometas más brillantes visibles desde la Tierra en los últimos 50 años. A lo largo de enero de 2007, el cometa se desplegó en el cielo del hemisferio sur, tan brillante que era visible a simple vista incluso durante el día. McNaught pertenece a un reducido grupo de cometas, apodados los Grandes Cometas y conocidos por su brillo excepcional. Sin embargo, el cometa McNaught presentaba una característica propia respecto a sus compañeros de grupo: una cola altamente estructurada, compuesta por muchas bandas de polvo distintas llamadas estrías, que se extendían a más de 100 millones de millas detrás del cometa, más que la distancia entre la Tierra y el Sol. Un mes después, en febrero de 2007, una nave espacial de la ESA (Agencia Espacial Europea) y la NASA llamada Ulises se encontraría con la larga cola del cometa.
"McNaught fue todo un espectáculo cuando llegó porque era increíblemente brillante y hermoso en el cielo", dijo Battams. “Tenía esas estrías, dedos polvorientos que se extendían por una enorme extensión del cielo. Estructuralmente, es uno de los cometas más hermosos que hemos visto en décadas ".



Cometa McNaught sobre el Océano Pacífico. Imagen tomada del Observatorio Paranal en enero de 2007.
Créditos: ESO / Sebastian Deiries

La causa de la estructura de la cola era desconocida para los científicos. Recordó los informes de otro cometa histórico de hace mucho tiempo: el Gran Cometa de 1744, que se dice que se desplegó dramáticamente en seis colas en el horizonte, un fenómeno que los astrónomos no pudieron explicar. Al desenredar el misterio de la cola del McNaught, los científicos esperaban aprender algo nuevo sobre la naturaleza de los cometas, y resolver dos misterios cósmicos en uno.

Una ilustración del Gran Cometa de seis colas de 1744, observada antes del amanecer el 9 de marzo de 1744, de “Les Comètes”, por Amédée Guillemin.
Créditos: Observatorio de París

Una diferencia clave entre estudiar cometas en 1744 y 2007 es, por supuesto, nuestra capacidad para hacerlo desde el espacio. Además del avistamiento fortuito de STEREO, otra misión, el SOHO (Solar and Heliospheric Observatory ) de la ESA / NASA, realizó observaciones periódicas mientras el cometa  McNaught se acercaba al Sol. Los investigadores esperaban que estas imágenes pudieran contener sus respuestas.
Ahora, años después, Oliver Price, un estudiante de doctorado en ciencias planetarias del . University College London’s Mullard Space Science Laboratory de Londres, en Gran Bretaña, ha desarrollado una nueva técnica de procesamiento de imágenes para extraer información de la gran cantidad de datos. Los hallazgos de Price, resumidos en un artículo de Icarus recientemente publicado, ofrecen las primeras observaciones de la formación de estrías y una inesperada revelación sobre el efecto del Sol sobre el polvo de los cometas.
Los cometas son fragmentos de gas congelado, roca y polvo que quedaron de la formación de nuestro sistema solar hace 4.600 millones de años, por lo que pueden contener pistas importantes sobre la historia temprana de nuestro sistema solar. Esas pistas se desbloquean, como de una cápsula del tiempo, cada vez que la órbita elíptica de un cometa lo acerca al Sol. El calor intenso vaporiza los gases congelados y libera el polvo interno, que fluye detrás del cometa, formando dos colas distintas: una cola de iones transportada por el viento solar, el flujo constante de partículas cargadas del Sol, y una cola de polvo.
Comprender cómo se comporta el polvo en la cola, cómo se fragmenta y agrupa, puede enseñar a los científicos sobre una gran cantidad de procesos similares que convirtieron el polvo en asteroides, lunas e incluso planetas, hace miles de millones de años. Uno de los cometas más grandes y estructuralmente complejos de la historia reciente, McNaught fue un cometa ideal  para este tipo de estudio. Su brillo y alta producción de polvo hicieron mucho más fácil resolver la evolución de estructuras finas en su cola de polvo.
Comprender cómo se comporta el polvo en la cola, cómo se fragmenta y agrupa, puede enseñar a los científicos una gran cantidad de procesos similares que convirtieron el polvo en asteroides, lunas e incluso planetas, todos esos miles de millones de años atrás. Apareciendo como uno de los cometas más grandes y estructuralmente complejos de la historia reciente, McNaught fue un tema particularmente bueno para este tipo de estudio. Su brillo y alta producción de polvo hicieron mucho más fácil resolver la evolución de estructuras finas en su cola de polvo.




Las primeras observaciones de la formación de estrías han revelado nuevos conocimientos sobre el efecto del Sol en las colas de polvo del cometa.
Créditos: Goddard Space Flight Center- NASA / Genna Duberstein

Price comenzó su estudio centrándose en algo que los científicos no pudieron explicar. "Mi supervisor y yo notamos cosas extrañas en las imágenes de estas estrías, una interrupción en las líneas", dijo. "Me propuse investigar qué podría haber sucedido para crear este efecto extraño".
La grieta parecía estar ubicada en la capa de corriente heliosférica, un límite donde la orientación magnética, o polaridad, del viento solar electrificado cambia de dirección. Esto desconcertó a los científicos porque, si bien hace tiempo que saben que la cola de iones de un cometa se ve afectada por el viento solar, nunca antes habían visto cómo el viento solar impactaba las colas de polvo.
El polvo en la cola de McNaught, aproximadamente del tamaño del humo del cigarrillo, es demasiado pesado, pensaron los científicos, para que el viento solar empuje alrededor. Por otro lado, en la minúscula cola de iones, iones y electrones cargados eléctricamente navegan fácilmente a lo largo del viento solar. Pero era difícil decir exactamente qué estaba sucediendo con el polvo del McNaught, y dónde, porque a unas 60 millas por segundo, el cometa viajaba rápidamente dentro y fuera de la vista de STEREO y SOHO.


El campo magnético del Sol, que está incrustado en el viento solar, impregna todo el sistema solar. La capa de corriente heliosférica, donde el campo magnético cambia la polaridad, sale de cerca del ecuador solar como una falda ondulada alrededor de la cintura de una bailarina de ballet.
Créditos: Goddard Space Flight Center-NASA

"Obtuvimos conjuntos de datos realmente buenos con este cometa, pero eran de diferentes cámaras en diferentes naves espaciales, que están todas en diferentes lugares", dijo Price. "Estaba buscando una manera de unirlo todo para obtener una imagen completa de lo que está sucediendo en la cola".
Su solución fue una novedosa técnica de procesamiento de imágenes que recopila todos los datos de diferentes naves espaciales utilizando una simulación de la cola, donde la ubicación de cada pequeña mota de polvo se mapea por las condiciones solares y las características físicas, como su tamaño y antigüedad, o cuánto tiempo había pasado desde que salió volando de la coma del cometa. El resultado final es lo que Price denominó un mapa temporal, que contiene información de todas las imágenes tomadas en un momento dado, lo que le permite seguir los movimientos del polvo.
Los mapas temporales significaban que Price podía ver las estriaciones a lo largo del tiempo. Sus videos, que cubren el lapso de dos semanas, son los primeros en rastrear la formación y evolución de estas estructuras, y muestran cómo los fragmentos de polvo se desprenden de la cabeza del cometa y se colapsan en largas estrías.
Pero los investigadores estaban muy entusiasmados al descubrir que los mapas de Price hacían más fácil explicar el extraño efecto que atrajo su atención a los datos en primer lugar. De hecho, la capa de corriente heliosférica fue la culpable de las interrupciones en la cola de polvo, rompiendo las líneas suaves y distintas de cada estriación. Durante los dos días que tomó toda la longitud del cometa para atravesar la capa actual, cada vez que el polvo se encontraba en el cambio de las condiciones magnéticas, se sacudió fuera de posición, como si cruzara un bache de velocidad cósmica.
"Es como si las plumas de la estriación se alborotaran cuando cruza la capa de corriente", dijo el científico planetario del University College London, Geraint Jones. “Si te imaginas un ala con muchas plumas, cuando el ala cruza la capa de corriente heliosférica, los extremos más ligeros de las plumas se deforman. Para nosotros, esto es una fuerte evidencia de que el polvo está cargado eléctricamente y que el viento solar está afectando el movimiento de ese polvo".
Los científicos han sabido por mucho tiempo que el viento solar afecta el polvo cargado; misiones como Galileo, Cassini y Ulysses lo vieron mover polvo con carga eléctrica a través del espacio cerca de Júpiter y Saturno. Pero fue una sorpresa para ellos ver que el viento solar afectaba a los granos de polvo más grandes como los de la cola de McNaught, unas 100 veces más grandes que el polvo visto expulsado de alrededor de Júpiter y Saturno, porque son mucho más pesados, lo que hace más difícil que el viento solar los empuje.
Con este estudio, los científicos obtienen nuevos conocimientos sobre misterios de larga data. El trabajo arroja luz sobre la naturaleza de las colas de cometas estriadas del pasado y proporciona una lente crucial para estudiar otros cometas en el futuro. Pero también abre una nueva línea de preguntas: ¿Qué papel tuvo el Sol en la formación y la historia temprana de nuestro sistema solar?
“Ahora que vemos que el viento solar cambió la posición de los granos de polvo en la cola de McNaught, podemos preguntarnos: ¿Podría haber sido el caso que al principio de la historia del sistema solar, el viento solar también desempeñó un papel en la organización del polvo antiguo?", dijo Jones.
Traducción de:


martes, 6 de noviembre de 2018

LA INCREÍBLE HISTORIA DEL HUEVO COMETARIO



Nuestra historia comienza el 2 de diciembre de 1680. En el Palazzo Massimo de Roma una gallina, que nunca había puesto un huevo,  cacareó de la manera más extraña y puso un huevo de extraordinario tamaño en el que se podía discernir la forma de un cometa. Sobre los cielos de Europa se cernía uno de los cometas más espectaculares del siglo. ¿Este prodigio marcaba la prueba de la correspondencia entre cielo y Tierra? Lo que hace interesante la historia es el brete en el que se encontró la Academia de Ciencias de París cuando el público y varios aristócratas les pidieron que se expidieran sobre el prodigio. Como Giovanni Cassini tenía en su poder un huevo puesto durante un eclipse por una gallina de Bologna en el que supuestamente se veía un sol eclipsado, y para no desairar a los aristócratas, la Academia tuvo que emitir un dictamen sobre el huevo remarcando que lo que se veían eran estrellas y no un cometa y que no era un prodigio. Pero los protestantes se apuraron a dictaminar que era una advertencia de la próxima caída del catolicismo.