martes, 26 de marzo de 2019

LA FALLIDA OBSERVACIÓN DEL COMETA BENNETT POR EL APOLO 13



¿Saben qué estaba por hacer la nave Apolo 13 cuando tuvo su conocida falla en uno de los cilindros que contenían oxígeno, lo que hizo abortar la misión, luego del famoso “Houston, We’ve had a problem here”?
Observar al cometa Bennett, uno de los grandes cometas del siglo XX, en lo que hubiera sido la primera observación de un cometa desde el espacio. Pero no pudo ser, la actividad programada, fotografiar el cometa, era justo lo que estaban por realizar el 13 de abril de 1970, con 55 horas transcurridas desde el despegue, cuando comenzaron los problemas, como se puede leer en la transcripción de las comunicaciones entre la nave y el centro de control.
El C/1969 Y1 fue descubierto el 28 de diciembre de 1969 por el astrónomo amateur John Bennett desde Sudáfrica. Sus observaciones visuales duraron 20 años, entre 1960 y 1980, y se focalizaron en repetir el trabajo de Charles Messier, pero para el hemisferio sur: catalogar todos los objetos nebulosos que pudieran ser confundidos con cometas, en el proceso descubrió 2 cometas y una supernova en la galaxia M83, la primera descubierta con telescopio. El cometa Bennett brilló intensamente, llegando a magnitud 0, hasta febrero de 1971 y fue uno de los más espectaculares del siglo XX.



martes, 19 de marzo de 2019

EL COMETA DE 1843 EN PARMA Y MONTEVIDEO



Uno de los libros fascinantes que leí en 2019 es “Montevideo antiguo” de Isidoro de María. Me sorprendió ver una referencia al cometa de 1843. Buscando en internet pude encontrar una referencia de la época en la “Gazzetta di Parma” en Google Books., del número del 20 de mayo de 1843. Allí se informaban las viscisitudes de la Guerra Grande en el vecino país y del sitio de Montevideo que comenzó el 16 de febrero de 1843. La lucha era entre los blancos sitiadores, comandados por el General Oribe y con la ayuda de los federales argentinos, y los colorados sitiados, comandados por Melchor Pacheco y Obes, con la ayuda de los unitarios argentinos y del Imperio Brasileño. El sitio se prolongó nada menos que hasta 1851 y parece tener algo de sentido el comentario del libro: “Desgraciadamente, soplaron malísimos vientos por entonces, con el cometa del 43, que todos vimos aparecer al oeste”, para una época aciaga (página 44 de la edición de EUDEBA de 1966.
A continuación de las noticias sobre el Sitio de Montevideo el periódico italiano transmite un reporte interesante: en el cielo sereno de la mañana del 28 de febrero de 1843, entre las 10,45 y las 11,45 se pudo ver al gran cometa de 1843 en pleno día con el Sol brillando, bastaba ubicarse detrás de un muro para que no diera directo el sol o situarse en la sombra para ver “una estrella brillantísima, muy cercana al Sol, de la que partía una franja brillante en dirección contraria al Sol y que se extendía cuatro o cinco grados”. Seguía el reporte mencionando que el hecho de que no cambiara de aspecto convenció a los que observaban (tanto en Parma, como en Bologna, Genova, y otras ciudades) de que no era un parhelio y sí un cometa.  Acerca de la “aparición tan extraordinaria” se debatía acerca de la causa de que apareciera tan brillante cuando pocas noches antes era un cometa de poco brillo, hasta que la consulta a los astrónomos develaba el misterio, esa misma noche el cometa (que ahora sabemos que pertenece a los muy brillantes, por su composición con prevalencia de hielo, familia de cometas rasantes llamados Kreutz) había emergido del perihelio.
El cometa de 1843 fue inmortalizado por una pintura realizada por el astrónomo Charles Piazzi Smith, espléndida obra de arte cuyo objetivo fue registrar con la mayor precisión posible la apariencia del cometa que observaba desde el Observatorio del Cabo de Buena Esperanza en Sudáfrica.

400 ENTRADAS



No queríamos dejar pasar este número redondo, no siempre se cumplen 400 encuentros con ustedes, queridos lectores. Hace poco recordamos el quinto aniversario del blog y renovamos un poco lo que podíamos esperar del blog, no teniendo acceso a un telescopio respetable para la observación cometaria.
Bueno, estamos un poco más optimistas, no sabemos por qué. Pero pensamos en salidas al campo cuando haya cometas que puedan observarse con pequeños telescopios o binoculares en cielos oscuros, en solicitar tiempo de telescopio en otros observatorios, en hacer llamamientos a observar, en seguir entusiasmados, en fin, con nuestros amados cometas.
¡Muchas gracias!

jueves, 14 de marzo de 2019

¿ES ‘OUMUAMUA UN COMETA PENDULAR?


Fuente:
19 de octubre de 2017. Esta es la fecha en la que empezó el misterio en torno al Oumuamua, la primera y controvertida roca interestelar que ingresaba en nuestro Sistema Solar un mes antes de su detección en la citada data por investigadores de la Universidad de Hawai. Desde entonces se han postulado múltiples teorías para tratar de calificar al primer visitante macroscópico (unos 300 metros de largo) venido de más allá de nuestro vecindario cósmico (se calcula que lleva millones de años viajando antes de ingresar en el Sistema Solar).
Asteroide, cometa, fragmento planetario, nube de escombros e incluso nave espacial alienígena varada por el espacio, han sido algunas de las explicaciones dadas por la comunidad científica. Ahora, la Universidad de Yale y astrónomos de Caltech tienen una nueva idea: es un cometa que oscila como un péndulo, en lugar de su giro habitual.
En los meses posteriores a la fecha de la primera detección del Oumuamua, el comportamiento de este objeto ha desconcertado a los astrónomos. Al principio, se creía que Oumuamua era un cometa, aunque la idea fue descartada casi de inmediato, ya que el objeto carecía de cola y coma, la «cabellera» que envuelve al núcleo y que está hecha de material evaporado de su superficie.
Por ello, los investigadorse llegaron a la conclusión de que podía ser un asteroide, aunque esta explicación no llegaba a responder del todo a la razón de su extraña trayectoria: el objeto acelera su velocidad, en lugar de disminuirla, como era de esperar. De hecho, hubo estudios que apuntaron que su comportamiento errático era debido a un choque con otro objeto.
También se planteó la «exótica» hipótesis de que se tratase de una vela ligera, una forma de nave espacial que depende de la presión de radiación para generar propulsión, similar a lo que está trabajando el proyecto Breaktrough Starshot. Así, los investigadores especularon con que esta vela ligera podía ser una enviada de otra civilización para estudiar nuestro Sistema Solar y buscar signos de vida.
«Ha dejado una serie de misterios a su paso», afirma en un comunicado Darryl Seligman, estudiante graduado de Yale y primer autor del estudio sobre la investigación aceptada para su publicación por la revista «Astrophysical Journal Letters». Seligman, el profesor de astronomía de Yale Gregory Laughlin y el profesor de Caltech Konstantin Batygin explican que la razón de la aceleración de Oumuamua no están de acuerdo con la teoría de la nave espacial alienígena y opinan que es bastante más mundana: en realidad se trataría de la ventilación del gas que fue calentada por el sol.
Tal «desgasificación» ocurre regularmente para los cometas, señalan los investigadores. Cuando un cometa se acerca al Sol -como en el caso de Oumuamua- y se calienta, su hielo estalla en un chorro. Las «colas» del cometa se forman cuando las partículas de polvo quedan atrapadas en el chorro y reflejan la luz solar. El problema aquí, como ya apuntó en su día la comunidad científica, es que este viajero interestelar ni tiene coma ni muestra el giro revelador que sería causado por el chorro de gas.
Y esta es su respuesta a ambas contradicciones: «En el modelo que proponemos para Oumuamua, el gas de ventilación no brota desde un solo punto fijo en la superficie -comenta Laughlin-. En cambio, los chorros migran a lo largo de la superficie, siguiendo el calor y la dirección hacia el Sol». Esto significaría que, en lugar de girar, como en un cometa típico, Oumuamua oscila de un lado a otro como un péndulo, según Laughlin.
La trayectoria del Oumuamua
Actualmente Oumuamua ha pasado más allá de la órbita de Saturno y se espera que tarde más de 10.000 años en salir del Sistema Solar de nuevo. Pero los investigadores dicen que su descubrimiento sugiere que casi todas las estrellas en la galaxia pueden expulsar tales objetos durante el proceso de formación del planeta.
Si eso es cierto, una nueva generación de telescopios, como el Telescopio de Levantamiento Sinóptico Grande (LSST) en Chile, puede ayudar a los científicos a aprender más sobre ellos. «Cuando se conecten LSST y otros telescopios nuevos, cada año se detectarán más de estos intrusos interestelares», concluye Seligman.

viernes, 8 de marzo de 2019

LA DESINTEGRACIÓN DEL COMETA C/1999 S4 LINEAR Y LAS MARCAS DE AGUA



El C/1999 S4 LINEAR fue el cometa más brillante de 2000 y se hizo famoso por dos circunstancias.
Primero, porque su fragmentación fue una de las más espectaculares que se hayan registrado fotográficamente.  El cometa fue descubierto por el programa LINEAR del MIT (que busca asteroides pero descubre cometas a patadas) en septiembre de 1999, al acercarse al Sol en julio de 2000 comenzó una dramática serie de aumentos de brillo que indicaban outbursts violentos y finalmente, desde el 18 de julio la fragmentación del pequeño núcleo de entre 200 y 600 metros de diámetro, compuesto mayoritariamente por hielo de agua y por ende muy brillante, que culminó el 5 de agosto con la completa desintegración, que fue captada por el telescopio espacial Hubble. En la siguiente imagen de NASA se combina la fotografía del Hubble (derecha), en la que se observan los fragmentos (ninguno superior a 50 metros de diámetro) y la del telescopio de la Universidad de Hawaii (izquierda), en el que aparece el cometa desintegrándose en una masa difusa, mientras que los fragmentos son visibles en la imagen del telescopio espacial. Ambas imágenes fueron tomadas el día de la fatídica muerte del Linear, el 5 de agosto.


Segundo, porque el análisis espectográfico del Linear mostró la abundancia de agua, que se sospechaba, y que el agua tenía una relación Hidrógeno-Deuterio muy similar a la de los océanos terrestres, por lo cual apuntalaba la hipótesis del origen cometario del agua en nuestro planeta, un tema interesantísimo que seguiremos en próximas entradas.

lunes, 4 de marzo de 2019

WERNER HERZOG HARÁ UNA PELÍCULA SOBRE METEORITOS Y COMETAS



El formato blog me permite discurrir sobre temas de mi interés, aunque no sean estrictamente astronómicos. Esta entrada podría ser un ejemplo. Cuando me enteré de que Werner Herzog estaba rodando un documental recorriendo cráteres meteoríticos alrededor del mundo para relacionarlos con el origen de la vida y las sucesivas extinciones masivas, así como las implicancias culturales y mitológicas de meteoritos y cometas. Un poco como hacemos en este blog, ¿no?
El cine de Werner Herzog es una de las formas de arte que más admiro, una exploración del alma de personajes que no pueden subordinarse a la tiranía de la sociedad. En este caso, compartirá la aventura documental con Clive Oppenheimer, su compañero en otro estupendo documental de 2016, “Into the Inferno”, en los que nos regala impresionantes e hipnóticas imágenes sobre los volcanes más impresionantes y su influencia sobre la cultura local.
La ansiedad nos consume por ver esta película de nuestro admirado y, sin ninguna pretensión de imparcialidad, idolatrado Werner Herzog.