lunes, 8 de septiembre de 2014

UNA INICIACIÓN A LAS LLUVIAS DE METEOROS AUSTRALES

Ya que comentamos nuestro avistamiento de un meteoro en la entrada anterior, quería aprovechar para recuperar una antigua nota publicada en la web de la AEA (arriba está el link a la web de nuestra Asociación Entrerriana de Astronomía). En ella se realiza un análisis de las poco estudiadas lluvias de meteoros australes, partiendo de las Púppidas Vélidas. Como actualización de la nota, quisiera decir que en el 2013 pudimos realizar algunas observaciones de esta lluvia y la tasa horaria zenital (ZHR en inglés) fue inferior en muy poco a la esperada. La lluvia que nos impactó en 2014 fue la de las Alfa Centáuridas, con un bólido reportado a la LIADA y a la International Meteor Organization y una noche en el techo del Observatorio difícil de olvidar (ver la entrada “Una noche para recordar”, http://www.cometasentrerios.blogspot.com.ar/2014_02_01_archive.html). Este año la luna llena nos dificultará la observación de Púppidas-Vélidas, una de nuestras lluvias preferidas, veremos cómo nos arreglamos.

 Las Púppidas-Vélidas
Introducción a las lluvias de meteoros australes

Basta con observar el calendario anual de lluvias de meteoros para percatarnos que las lluvias con más alta Tasa Horaria Zenital están servidas para el disfrute del observador del hemisferio norte. Algunas ni siquiera son visibles desde nuestra ubicación geográfica (las Eta Acuáridas y las Perseidas, éstas coinciden con las vacaciones estivales boreales y son por lo tanto muy observadas), otras lo son (como las Leónidas), pero el radiante se presenta bajo en el horizonte, lo que hace que la tasa de meteoros observados no llegue ni a acercarse al máximo teórico (la Tasa Horaria Zenital es un valor calculado en base a una altura zenital con una visibilidad perfecta y para un observador que pueda observar estrellas hasta una magnitud de 6,5). Durante el máximo de las Gemínidas el radiante no estuvo nunca a más de  25° de altura sobre el horizonte, por lo que en vez de 120, la tasa no podría superar los 30, lo que en términos de visibilidad concreta es bastante menos.
Pero también es verdad que el hemisferio sur es mucho menos poblado que el hemisferio norte y hay una serie de lluvias meteoríticas cuya observación es imposible o muy difícil para los habitantes del hemisferio norte. Estas lluvias han sido pobremente estudiadas, por lo que presentan grandes desafíos para el observador austral. Una de ellas es la conocida como las Púppidas-Vélidas.




Gráfico en el que se puede observar como la tierra cruza en su órbita la nube de meteoroides dejada por un cometa, lo que origina una lluvia de meteoros.

Esta lluvia se encuentra activa desde el 1 al 15 de diciembre y tiene una THZ de 10 por hora en su máximo previsto para el 7 de diciembre. Sin embargo, estos 3 datos (extraídos del calendario anual de la International Meteor Organization)  son provisorios por cuanto las observaciones son muy pocas para determinarlos con precisión. La observación de esta lluvia, por ende, es de capital importancia para terminar de determinar esos parámetros. Así lo sostiene la propia International Meteor Organization, que define a esta lluvia como “pobremente estudiada” en su calendario 2012 (http://www.imo.net/calendar/2012#pup).
Sus meteoros son generalmente poco luminosos, pero alrededor de la fecha estimada para su máximo se suelen ver bólidos. Los pocos datos disponibles hacen muy difícil incluso la determinación del cometa del que provendrían, aunque una de las hipótesis es la del asteroide 2102 Tantalus (Jenniskens, Peter, Meteor Showers and their parent comets, Cambridge, p.519), con lo cual pertenecerían al grupo minoritario de lluvias de meteoros provenientes de asteroides (como las mismas Gemínidas).
La observación de las Púppidas Vélidas es muy favorable para el observador argentino, por cuanto su actividad es a finales de la primavera, el radiante se encuentra muy alto en el cielo durante la mayor parte de las noches entre el 1 y el 15 de diciembre. Como su periodo de actividad coincide con el máximo de las Gemínidas y con otras lluvias cuyos radiantes se encuentran cercanos al radiante de las Púppidas Vélidas (Sigma Púppidas, Hídridas y Monocerótidas), su observación es sumamente reconfortante.


Ubicación del radiante del las Púppidas Vélidas

La Asociación Entrerriana de Astronomía ha realizado observaciones de esta lluvia en los años 2010 y 2012, como parte de las campañas de la Sección Meteoros de la Liga Iberoamericana de Astronomía. En 2010 se pudo calcular una THZ de 11, en 2012 una de 13, en ambas ocasiones 2 días después del máximo de máxima actividad. Estas observaciones fueron reportadas a la Sección Meteoros de la Liada, y la de 2012 a la International Meteor Organization. Las observaciones parecen indicar una THZ mayor a la estimada.
Es nuestra firme intención de continuar con la observación de las Puppidas Vélidas y las lluvias de radiante cercano en los años venideros. Los observadores australes tenemos la oportunidad de aportar valiosas observaciones y reportes no sólo de esta lluvia sino también de otras lluvias de meteoros favorables para la observación desde el hemisferio sur.
Hasta la llegada del invierno (cuando realmente se hace difícil pasar 1 hora de noche al aire libre sin moverse), las lluvias de meteoros australes con una THZ que permite la observación en zonas no tan oscuras (siempre que se alcance una magnitud límite estelar de al menos 4,5) son las siguientes:
Alfa Centáuridas (28-1 al 21-2, con máximo el 8-2 y una THZ de 6)
Gamma Nórmidas (25-2 al 22-3, con máximo el 13-3 y una THZ de 8)
Virgínidas (25-1 al 15-4, con máximo el 24-3 y una THZ de 5)
Sagitáridas (15-4 al 15-7, con máximo el 19-5 y una THZ de 5).
Desde la Asociación Entrerriana de Astronomía estamos a disposición de cualquier interesado que quiera asesoramiento para realizar observaciones con valor científico, ya que la observación de lluvias de meteoros es un campo en el que el aporte del amateur es fundamental.



Planilla de Observación correspondiente al día 9-12-12

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