El
cometa Lovejoy ya tiene varios motivos para sentirse orgulloso, como haber sido
el mejor cometa de 2014 y probablemente de 2015, pero para mí será siempre el
primer cometa que observó mi hija.
La
semana comenzó con el reporte de la desconexión de la cola de iones. La cola de
iones es la cola recta que se observa antes que se forme la cola curva
compuesta de polvo. Ambas se forman por
la acción del viento solar, que en el caso de la cola de iones hace que los
átomos más ligeros de los gases ionizados de la coma apunten en dirección
contraria al Sol. Esta cola de iones puede verse perturbada por el campo
magnético del sol o por el viento solar, bastando un cambio de polaridad para
que la cola se desconecte, lo que ha sido el caso de nuestro cometa, ilustrado
por la siguiente fotografía, del italiano Rolando Ligustri (fuente: https://rastreadoresdecometas.wordpress.com/2015/01/10/desconexion-cola-ionica-lovejoy/).
Este
verano lluvioso ha conspirado para que no pudiéramos observar todos los días al
Lovejoy, pero nos la arreglamos para hacerlo en la primera hora del lunes 12 y
a las 21,30 del jueves 15. Estimamos una magnitud de 4.0 el lunes y,
seguramente por una atmósfera más pura, me pareció que sabiendo donde estaba
parecía estar visible a simple vista, lo que no sucedió el jueves.
La
observación del jueves la compartí con mi hija Atina, que a sus 5 años hizo su
primera observación telescópica. Antes que anocheciera, antes de las 9, ya
estábamos armando el telescopio. Ella manejaba la linterna y su ayuda fue
indispensable. Mientras buscaba las Pléyades para que las viera con el mismo
ocular con el que observaríamos el cometa (32 mm.) me dijo “ahí pasa el cometa”
y me señaló un objeto muy brillante que pasaba muy velozmente por el
firmamento. Cuando aumentó su brillo por unos segundos y luego disminuyó me
percaté que había sido un satélite Iridium, y traté de explicarle a ella qué era un satélite.
Luego,
a buscar el cometa por arriba de las Pléyades. Entonces hubo un poco de ansiedad
infantil (“¿ya está?... ¿ya lo encontraste?), hasta que apareció en el campo
del ocular, en su aparición más espectacular. Estime una magnitud de 3.9, un
grado de condensación de 7 y un diámetro de 28 minutos de arco para su coma.
Parece
ser que ya ha llegado a su máximo y que comenzará a disminuir su brillo, pero
con los cometas nunca se sabe.
Para
mí siempre será el cometa de Atina.
Aquí
les dejo un gráfico de mi última observación y los 2 reportes a la LIADA
C/2014Q2 Jan. 12.12 UT: m1=4.0 Dia.=25’, DC=7, Cola:NO; 10X50B; Mét. Sidgwick,
Cat. Tycho II; Alberto Anunziato
(Paraná, Argentina).
C/2014Q2 Jan. 16.01 UT:
m1=3.9 Dia.=28’, DC=7, Cola:NO; 10X50B; Mét. Sidgwick, Cat. Tycho II; Alberto Anunziato (Paraná, Argentina).
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